Queridos Papás y Mamás
Es para nosotros importante vincularnos
de manera integral en el proceso de crecimiento de nuestros estudiantes, por lo
que se considera importante trabajar conjuntamente, brindándoles algunas
sugerencias que pueden ser de utilidad para aplicar y llevar a cabo en casa.
Por tal motivo a continuación se realizan
algunas recomendaciones que ustedes pueden tener en cuenta para bajar los
niveles de ansiedad que puedan tener los niños, niñas y jóvenes durante esta temporada
En los niños la ansiedad se puede producir
frente a situaciones que se escapan de su control y las cuales están
acompañadas de manifestaciones físicas como sudoración de las manos,
hiperactividad, dolor de estómago, manos y camisa en la boca. Es importante
atender estos síntomas con el propósito de evitar riesgos antes de que se
convierta en una dificultad afectiva.
1. No minimicen sus sentimientos. Decirles que no
se preocupen por sus temores lo único que les puede causar es que crean que
está haciendo algo malo por sentirse ansiosos. Déjenles saber que está bien
sentirse mal por algo y motívenlos para que compartan sus emociones y
pensamientos; por ejemplo no debemos detener su emoción diciéndoles “eso no
vale la pena no te preocupes ó yo no te puedo ayudar”.
2.
Escuchen. El
escuchar a las personas puede ser un tranquilizador
cuando algo le molesta o le atemoriza, Si observamos que no quieren hablar, háganle
saber que estarán siempre ahí para escucharles. Con estar a su lado y
recordarle que la aman y apoyan es suficiente.
3.
Ofrezcan
comodidad y distracción. Traten de hacer algo que disfrute, como acompañarlos en su juego
favorito o abrazarlo fuertemente o dejar que se recueste en ustedes mientras le
leen algo que les gusta. Todos los hijos, sin importar su edad, necesitan de
esta clase de acercamientos cuando se siente tristes, preocupados y/o ansiosos.
4.
Salgan al
aire libre el tiempo que está permitido. El ejercicio ayuda a mejorar el mal
humor, la ansiedad y todo sentimiento negativo. Aunque tan solo sea una
caminata alrededor de la casa, el aire fresco, los rayos del sol y la actividad
física pudiera ser justo lo que los hijos necesitan para levantar el espíritu y
mirar las cosas positivamente.
5. Mantengan las rutinas. Hagan
un balance de lo que significaría cualquier cambio y trate de mantener la
rutina regular, en lo posible. Mantener sus horarios de comidas, de ir a dormir,
de hacer tareas etc. será de gran ayuda. Asegúrense de que coman adecuadamente
y duerman lo suficiente. La falta de descanso o las comidas fuera de horario
pueden contribuir al estrés infantil. Si se siente bien estarán mejor preparados
para cumplir con sus estudios y enfrentar cualquier situación que les esté
causando molestia.
6.
Limite la
exposición de sus niños a noticias o historias no alentadoras. Si por todos los
lados, están viendo y escuchando información sobre el covid-19, hablen con ellos
para explicarles lo que está sucediendo y no dejarles la información para que
sean ellos quien la interprete. Informénles que con los cuidados y precauciones
que están teniendo ellos y las personas
que aman están evitando el peligro.
7.
Ustedes deben ser modelo. La manera de reaccionar
ante los sucesos de la cotidianidad son ejemplos para que los niños pueda
interiorizar la información que llega del medio; es claro que es difícil
bloquear la ansiedad de nuestras vidas en un mundo con noticias que aparecen
las 24 horas del día sobre tragedias, enfermedades, maldad; pero sí se puede
tratar manejar la información y transmitírsela
a los niños de modo que ellos la asimilen sin que le genere mayor estrés, mientras
más se logre mantener la calma, reducir al máximo la exposición a estímulos
generadores de estrés y haya tranquilidad en casa, menos ansiedad habrá en ellos.
ANGELA
MARIA BUILES T.
Psicóloga
USB
Medellín
Me Cuida
Secretaria
de Salud
Alcaldía
de Medellín
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